Noviembre: TALLERES AULA ABIERTA
La enseñanza de cocina en la infancia resulta un medio poderoso para iniciar su independencia a través de un camino divertido y creativo.
Además de pasarla bien, los niños logran mayor confianza en su capacidad de crear soluciones, desarrollan sus sentidos del tacto, la vista, el olfato y el gusto.
Aprenden a valorarse y valorar [...]
La enseñanza de cocina en la infancia resulta un medio poderoso para iniciar su independencia a través de un camino divertido y creativo.
Además de pasarla bien, los niños logran mayor confianza en su capacidad de crear soluciones, desarrollan sus sentidos del tacto, la vista, el olfato y el gusto.
Aprenden a valorarse y valorar el producto de su obra; a disfrutar lo que hacen y a compartirlo con sus seres queridos.